Cada final de legislatura se repite el mismo llamado a los congresistas para evitar el 'pupitrazo' y así acelerar la aprobación de proyectos represados durante el período de sesiones. Sin embargo, frente al proyecto de ley de seguridad social y derechos de las parejas homosexuales, la situación es la opuesta. Desde su aprobación en comisión el pasado abril, ha languidecido en la Cámara, esperando turno para último debate.
Según el senador Armando Benedetti, el presidente de la corporación, Alfredo Cuello Baute, está saboteando el proyecto, el cual, a pocos días de terminar sesiones, continúa sin posibilidades de discutirse. Su eventual hundimiento echaría por la borda el juicioso trabajo de las organizaciones por los derechos de los gays y el histórico respaldo que las mayorías parlamentarias le han dado en los distintos debates. Por más de año y medio, el país y el Congreso han debatido con seriedad la adopción de medidas de protección y de seguridad social para las parejas del mismo sexo.
La actitud del presidente de la Cámara contrasta con la de la Corte Constitucional, que ha fallado a favor de proteger el patrimonio de las parejas homosexuales. O del Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, que, en una decisión sin precedentes, solicitó al Estado colombiano el reconocimiento de la pensión a un homosexual que había perdido a su compañero.
Hasta en México, país reconocido por su cultura machista, algunos estados aprueban legislaciones favorables a la comunidad gay.
Decisiones todas basadas en el reconocimiento de los homosexuales como una minoría cuyos derechos no deben seguir siendo vulnerados.
En Colombia, el proyecto es un paso adelante en el desmonte de situaciones discriminatorias y perpetuadoras de injusticia. No hay razón para que la plenaria de la Cámara no lo apruebe. Partidarios y opositores han contado con las garantías para expresar sus opiniones e ilustrar a la opinión pública. La agenda de la corporación en estos últimos días no está escrita en piedra.
Algunos proyectos podrían ser pospuestos para la otra legislatura sin mayor costo y así dar prioridad al último debate de esta ley.
No aprobarlo sería no solo negar a la minoría homosexual un derecho, sino también un flagrante abuso de poder.
posted by Fiorixk @ 6:19 p. m.
